El mundo deportivo no está peleado con la homosexualidad, aunque son pocos los deportistas que se atreven a declarar públicamente su preferencia sexual, son muchos los atletas que prefieren relacionarse con personas de su mismo sexo. En el futbol, un deporte que normalmente es jugado y seguido por “machos”; el miedo de salir del clóset es grande. Si no declarando su homosexualidad son objeto de gritos y burlas sexistas desde las gradas, imagina la presión a la que son expuestos una vez que se deciden a decir: soy gay.

El valor lo han tenido algunos futbolistas, y éstos son solo algunos de ellos:

Justin Fashanu Fue el primer jugador famoso en salir del clóset. Además de ser gay y sufrir rechazo de parte de aficionados, familia y compañeros deportistas, su color de piel fue objeto de burlas. El nigeriano tuvo una carrera deportiva llena de tragedias. Nunca encontró estabilidad laboral por declarar su sexualidad y tuvo qué retirarse. Poco tiempo después fue acusado de abuso sexual por un chico de 17 años en Estados Unidos.

Robbie Rogers Cuando jugaba para LA Galaxy en 2013, decidió hablar abiertamente de su sexualidad. Recibió mensajes de apoyo incondicional en las redes sociales. Fue seleccionado nacional en Estados Unidos. Le llegó el miedo a la represión y anunció su retiro. Esto no terminó ahí, más tarde se arrepintió de hacerlo y volvió a la cancha.

David Testo Mientras jugaba en el Montreal Impact en el 2011 se declaró homosexual. Su familia y compañeros de equipo aplaudieron su decisión y lo respaldaron, pero no sucedió lo mismo con los directivos que decidieron darlo de baja. Con esto llegó el fin de su carrera deportiva, pues ningún otro club quiso trabajar con él.

Thomas Hitzlsperger Alemán y jugador de élite, admitió ser gay poco tiempo después de su retiro. Tuvo novia durante ocho años y a unos días de casarse decidió terminar la relación. Años después admitió su sexualidad y ahora es portavoz de algunos colectivos que luchan contra la homofobia y xenofobia.

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